China se ha convertido en uno de los principales actores geopolíticos
mundiales como uno de los lideres del denominado Sur Global: que junto a otros países
de los BRICS ejercen una influencia como contrapeso y en ocasiones también mediante
la confrontación a la influencia y dominio occidental en la economía y las
relaciones Internacionales el cual está cada vez está más cuestionado.
La reciente evolución de la economía china tras la reapertura postpandemia
ha suscitado muchas dudas en su capacidad de crecimiento a grandes tasas a los
que nos tenía acostumbrados en el pasado, con algunos sectores como el inmobiliario
entrando en graves turbulencias y con una posible crisis de deuda en ciernes. Una
posible desaceleración económica o incluso la entrada de la economía china en
estanflación no está descartada.
Algunos economistas, como Adam Posen, están cuestionando las políticas
económicas llevadas a cabo en los últimos años por las autoridades chinas dado
que pueden estar lastrando el crecimiento chino futuro.
Algunos de los posibles principales factores explicativos de esta situación
y de su posible evolución serían los siguientes:
1) Intervención
ideológica del sector privado chino: la finalización de la máxima establecida por Deng Xioaping “no
politics, no problem” donde las esfera política y la económica coexistían separadamente
y donde se ha pasado de una libertad aceptable en el desarrollo de negocios
privados por parte de los ciudadanos chino a un recelo del sector privado y de
los capitalistas de éxito por parte de las actuales autoridades chinas de Xi Jinping.
2) Fomento de una política económica de intervención pública centralizada: con un mayor autoritarismo e intervención pública de la economía, finalización de las reformas promercado, fomento de las empresas estatales (campeones nacionales) en sectores estratégicos como el tecnológico y automoción eléctrica, centralización de las decisiones y posible establecimiento de barreras proteccionistas al comercio.
3) Sacrificio del crecimiento por la igualdad: el alto crecimiento chino en el pasado ha provocado grandes desigualdades sobre todo geográficas en la sociedad china lo cual provocaba inestabilidades sociales. Las actuales autoridades chinas parece que prefieren tener un crecimiento menor en el futuro a cambio de tener una mayor estabilidad social.
4) Demografía
adversa con pérdida de población: China ya ha empezado a
perder población año a año incrementando el envejecimiento y no se llevan a cabo
políticas inmigratorias de atracción de talento exterior. Esto puede lastrar el
crecimiento chino vía consumo que no ha acabado de arrancar tras la pandemia
5) Falta de
consolidación de la clase media y alta propensión al ahorro de la población
china: la posible
desconfianza en el futuro crecimiento de la economía y las interferencias por
parte de las actividades en el sector privado provocan una menor inversión y
consumo de bienes duraderos y una mayor propensión al ahorro en productos de
bajo riesgo. El cambio de modelo de crecimiento con la construcción de una
clase media china que tire de la demanda vía consumo avanza todavía de forma excesivamente
lenta.
6) Asignación ineficiente de recursos económicos a sectores económicos con baja productividad como el inmobiliario: la inversión de una ingente cantidad de recursos focalizada principalmente en infraestructuras e inmobiliario y la reciente quiebra de algunas de las principales inmobiliarias ha generado enormes deudas y desconfianza en los inversores. La reasignación de recursos a sectores con mayor productividad va a ser lenta y costosa lo cual puede lastrar el crecimiento futuro de la economía china.
7) Posible huida de capitales, tecnología y población china: el ahorrador chino dada la baja rentabilidad de algunos de sus sectores productivos puede optar por invertir en el exterior en mercados con mayores rentabilidades. Asimismo, los trabajadores chinos pueden también optar por buscar oportunidades de trabajo en el exterior y parte de su tecnología puede acabar favoreciendo otros países.
Esto puede ser aprovechado por países como Estados Unidos que puede succionar estor recursos de capital, trabajadores y tecnología a su favor si ofrece oportunidades atractivas.
8) Reasignación
de recursos y refuerzo del modelo económico industrial basado en exportaciones:
una de las más probables
evoluciones de la economía china para continuar creciendo va a ser la
reasignación de los recursos públicos desde sectores no productivos hacia sectores
dónde China tiene un liderazgo como la fabricación de baterías y coches eléctricos,
economía verde o las manufacturas más sofisticadas dado que China sigue siendo
una superpotencia industrial. Todo ello puede provocar una nueva inundación de
los productos chinos en los mercados globales como está ya ocurriendo con los coches
eléctricos.